Tengo que escribir sobre ésto, en verdad, es apremiante, por salud mental...
¿¡ Les depositaron estas tarjetas a quienes llamaron?! les dije a mis padres que estaban hechos un lío entre llamadas de celular y locales, para denunciar, sentados en la mesa del comedor de casa -si-me contestó uno de ellos y ya no podemos hacer nada...apenas hace un dia habían regresado de pasar casi una semana en Veracruz...
Aventé las tarjetas de prepago a celular que mi sobrinito barajeaba una y otra vez entre sus pequeñas manos, en un momento, cuando yo iba llegando a casa, luego de recibir un mensaje a mi celular de parte de mis padres diciendo que alguien de mi familia se había ganado un auto jetta 2009, un celular y dinero, y que irían a entregar el premio a casa, y que debiésemos estar presentes.
Volví mi atención a las tarjetas...me di cuenta que tenían raspado ya el numero de folio, muestra inequívoca de que mis padres habían caído en la trampa y habían dado los numeros para dar crédito telefónico...cuando me di cuenta de lo que estaba viendo reaccioné, y fue entonces que pregunté a mi sobrino quien me veía ir y venir diciendo una y otra cosa, si los abuelos habían comprado éso para los que habían llamado-si-dijo: les dije que no dieran ningún dato, que llamaran a la policía, etc etc etc. dije, entre frustrada y asustada, pues antes había hablado con ellos por teléfono para prevenirlos de que no siguieran cayendo en el engaño.
Me contuve de decir mas porque justo hoy le había dicho a un paciente mio, de solo 10 años, que si los otros te "hacen" enojar es porque les estás otorgando mucho poder, pues él me había contado que le había gritado cosas a su hermanito pero que estaba tan enojado, que no las recordaba, y bueno...éso está bien cuando uno tiene 10 años, pero a mi edad...
Are you angry? me dijo mi sobrino que a veces habla español y a veces inglés -si- respondí- why? entonces fue que me tomé un respiro y al ver su expresión, decidí hacer lo que en psicoterapia se llama un time out, me quedé viendo su carita llena de dudas, sin entender como era todo éso de que habían estafado a mis padres con un supuesto premio que solo servía de carnada para obtener crédito en celulares y direcciones...lo miré y traté de explicarle con calma, y de contestar todas sus preguntas. Todos estaban tan en lo suyo, que nadie había reparado en que él no entendía nada. Será que viene de otra cultura, no sé...
¿Les dieron todo éste dinero, por nada?!-dijo-mientras volvia a recorrer las tarjetas una y otra vez con sus manos lleno de asombro-si-¿porque? porque son delincuentes, entonces debemos denunciarlos-¿y los pondrán en la cárcel?-si-¿por cuanto tiempo?-no lo sé...¡debes ir a la corte!me dijo...entonces caí en la realidad...México de mis amores, dónde te pueden extorsionar por teléfono si eres tan ingenuo, EN TOTAL IMPUNIDAD...por decir lo menos ... pero claro, mi sobrino viene de otro país...
Éstos gusanos (con perdón de los gusanos) operan en la impunidad, éstos y todos, delincuentes comunes y de cuello blanco. Algunos pacientes muy caritativos me han dicho que ésas personas deben rehabilitarse, cuando les digo que yo trabajé muchos años aplicando pruebas psicológicas a delincuentes, incluso en Islas Marias, y que dejen de rezar por ésos tipos y que entiendan de una vez que no tiene remedio, que son basura, que están echados a perder, espero que entiendan de que les estoy hablando...
Y por otra parte, pienso en la gente con que me topo muchas veces, y me imagino: éste sujeto (A) tiene credencial de lector, y va a decidir cosas, ¡utá madre!, pobre México...
Y entonces veo la trilogía maldita; delincuentes (fuera y en el gobierno), impunidad, y ciudadanos ignorantes con poder de decisión...
Conduje lo mas rápido posible desde el consultorio de mi nutrióloga y amiga, quien tampoco podía dar crédito de lo que estaba pasando en mi casa, porque ya está muy difundido que tipo de fraude es ése y como operan los que hacen las llamadas...al llegar, maldita sea, una camioneta del año estorbaba mi entrada, era de una de las clientes del negocio de enfrente, por enésima -vez pensé-y estaba por decir algo cuando vi a mi sobrino asomado por la ventana-hola tiaaa-me dijo, hola-¿sabes que mis abuelos se ganaron un auto nuevo?, éso no es cierto-dije-si-contestó-es una broma ¿verdad?-...yo lo sé.
Es una broma, es mucho peor que eso, si, esa es la situación en éste país, negarlo no servirá de mucho...puede ser que yo sea una suerte de miembro sano de la familia disfuncional.
En las familias con éstas características, se manejan los secretos y el no hablar, todos saben que algo anda muy mal pero nadie dice y nada y todos hacen que no está pasando nada (que no es lo mismo).
Pero siempre hay un miembro de la familia que es más sano que los demás y delata a todo el clan, se enferma, va al psicólogo o al médico, se investiga y suelta la sopa, es el que tiene los síntomas, pero es el que los representa por el resto, pero curiosamente, es el único sano, y él único que pide ayuda, como sea, se las arregla inconscientemente para gritar : ¡hey! ¡aquí está pasando algo!...y muchas veces, el resto de la familia lo excluye y lo empieza a culpar de todas las disfuncionalidades del núcleo, entonces se convierte en un chivo expiatorio...y a quí o la familia decide ventilar el alcoholismo o el abusdo o lo que sea que esté pasando en sus entrañas o se quedan siempre en la negación y la complicidad, en la neurosis familiar pues...
Sólo trasládenlo a la historia actual mexicana..
Soy una confrontadora crónica, lo bueno que soy terapeuta y no contadora...y así, al menos sirve de algo para algunos, incluyéndome...y sí, creo que entonces seguiré siendo como el miembro sano de la familia disfuncional, nunca podré hacer que "aquí no ha pasado nada".
Ni pasará si seguimos guardando silencio....lo que si creo es que el miembro sano de la familia disfuncional, se debe sentir de la chingada, tal como yo me siento ahora, no la tiene nada fácil...pero hay que entrarle.
-¿Ves porque estoy enojada?- le dije a mi sobrino, tras explicarle todo lo ocurrido lo mejor que mis conocimientos en desarrollo humano me permitieron, y sabiendo que uno no puede ocultarle a los niños lo que pasa, porque ésas disonancias cognitivas luego los vuelven mas neuróticos que el promedio, si- exclamó alzando sus brazos al tiempo que los sacudía hacia abajo con fuerza.
Finalmente alguien me entendía...luego nos pusimos a ver en la televisión como su luchador favorito le daba una buena paliza al contrincante, me explicó que una vez caído en cierta posición, le podían pegar como quisieran-incluso en sus partes privadas-dijo...nunca quiero verme en ésa situación, pensé, por éso grito, repelo, me enojo, peleo y denuncio, no puedo darme por vencida, ya hay bastantes tirados en el suelo en éste país...
